jueves, 22 de agosto de 2019

Mamá, Papá, no me saques de pintura para meterme en inglés, mates o deberes...

Foto: Alumna pintando este verano, y que lleva varios años
viniendo a clases "a pesar" de estudiar en el instituto.


Hace 21 años que damos clases de pintura con óleo o acrílico. Desde entonces y hasta ahora se repiten historias desafortunadas o absurdas hasta el cansancio. 

Han pasado tantos niños y niñas con habilidad y sensibilidad para la pintura y el dibujo, que han tenido que abandonar las clases de pintura contra su voluntad, porque la madre o el padre ha priorizado las clases de inglés, de matemáticas o clases de deberes, sobre la pasión del pequeño o pequeña. 

Una o dos horas a la semana han resultado ser mucho tiempo para dedicarle a una disciplina como la pintura que se subestima por sistema. A esos niños y niñas les suprimen ese tiempo semanal por una razón "X", para una asignatura "X". Que siguiendo una estrategia alternativa, se podría solventar sin prescindir de la pasión del niño o la niña. 

Cuando a lo largo del tiempo, disciplinas como la pintura o el dibujo son las actividades favoritas de un niño o niña, es muy posible que su sensibilidad al mundo sea mayor al resto de su entorno. No apoyarle en su inquietud, menospreciarla, ningunearla o no tomarla en cuenta, es hacerle una velada invitación a que olvide dicha sensibilidad para apreciar el mundo, porque no es importante, o no es útil, o no es socialmente aceptada o no es adecuada para los cánones clasistas de la familia a la que pertenece.

En una ocasión, charlando con la madre de una alumna, nos dijo que en el futuro le apetecería pintar, que es algo que siempre le gustó y que por circunstancias y preferencias propias y de su entorno no pudo hacer. Yo le dije que nos hemos topado con gente mayor de 65 años que nos dice lo mismo.

Si algo que te apasiona o tienes curiosidad por hacerlo, como  pintar o dibujar ¿Qué esperas para ponerte a ello? Tener 65 años y la jubilación...


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