La derrota

Hemos perdido, nos han derrotado, nos opusimos en bloque contra la tala de árboles en el parque A Xunqueira, porque estamos hartos de que Tomás Fole, alcalde de Vilagarcía de Arousa, corte los árboles, a escondidas, con alevosía y con la evidente ventaja de atacar a seres desvalidos que no pueden ni huir, ni protestar, ni votar. Argumentando la sin razón, los berrinches y las pataletas, justificando a posteriori con informes de amiguetes que dirán lo que él quiere. Primero fueron los 30 árboles de la Compostela, aniquilados sin más, después en el Castriño, y después muchos casos aislados, salpicados en parques, ríos... Por eso defendimos con todo lo que pudimos a los Olmos del paseo central de A Xunqueira, sin éxito, porque ya no están.

Escuché que un amigo dijo: "Lamento que los hayan cortado, porque puede ser que a muchos de nosotros no nos alcancen los años, para volver a sentarnos bajo la sombra de un árbol en ese parque." Frase demoledora, que hace aún más grande nuestro fracaso. Nuestras fuerzas no fueron suficientes para salvar a los últimos árboles débiles, que quedaban de pie.

Hace justo un año hicimos un taller de "land art" en ese parque, donde les enseñamos a los niños que a los árboles había que disfrutarlos, cuidarlos y darles afecto. Todos volvieron felices a casa, sintiéndose bien, por el acercamiento con ellos. Ahora podrán ver un ejemplo vivo de lo contrario, el trágico resultado de la soberbia humana, que justifica cortar árboles con palabras huecas como "ya está hecho y está bien hecho".  

Defendimos a los árboles con firmas, concentraciones, esquelas fúnebres y llamadas telefónicas, si hay una próxima vez, haremos algo más contundente.

Pinza triste y derrotada