Trajineras listas para navegar

Ir a Xochimilco en México, es hacer un viaje mágico; navegar por sus canales y lagunas te saca del espacio-tiempo y te lleva al antiguo imperio Azteca. Por eso queríamos hacer un taller dedicado a esa experiencia. Diseñamos el taller conscientes de que implicaría mucho trabajo previo, pero bien lo merecía.

Dudamos entre dar las trajineras desarmadas y que los niños las armaran, pero en dos horas solo tendrían tiempo de pegar y cortar las piezas y no podrían tunearlas, y como el objetivo era buscar la expresión y no la precisión, pues decidimos entregarlas así, casi listas para colorear.

Previo a que tunearan su Trajinera Xochilteca Power, les mostramos un vídeo de Xochimilco, grabado con drón, también vieron algunas fotos que nosotros hicimos allí, y un vídeo del Ajolote, o Axolote, otro ser mágico que habita las aguas de Xochimilco.

Con esas pautas y un montón de colores, se pusieron a pintar sin pudor alguno. Eso sí, con mucho cuidado porque había esquinas difíciles de cubrir.

Al esqueleto de la trajinera le añadieron un tupé, y hubo quién le puso mucho más, tanto por dentro como por fuera.

En las paredes del espacio de trabajo, pegamos cuatro fotos del Ajolote, y una hoja con toda la información relevante de este animaliño tan peculiar.

De hecho, la información sobre el Axolote la colocamos justo frente a la merienda, comiendo y aprendiendo ;-)

Aquí el resultado: unas trajineras muy gallegas.

Sara

Jose

Andrés

Alicia

Carla

Lola

Xiana

Nuria

Augusto Metztli

 

Marthazul

Un acercamiento de la cubierta y la mariposa que corona la trajinera de Marthazul.

La cubierta de la trajinera de Carla, es de colorines, como un arcoiris, y dentro hay un río con un puente.

Lola, decidió hacer una trajinera que paseará a una bebé, por eso hizo una cuna, con su luna particular, y además le puso escaleras, para subir cómodamente.

Y Alicia fue también una de las que detalló el interior de la trajinera: optó por sus maravillosos puntos coloridos y estilosos, como solo ella sabe ponerlo. A mí, en lo personal, me parece una galleta redonda decorada.

Todas las trajineras esperando comenzar su viaje.

Una pequeña animación de las trajineras coloridas.

Por último, la versión personalísima de los Axolotes, en el siguiente orden: Marthazul, Sara, Alicia, Xiana, Augusto Metztli, Nuria, Jose, Andrés.

"Empecé viendo en los axolotl una metamorfosis que no conseguía anular una misteriosa humanidad. Los imaginé conscientes, esclavos de su cuerpo, infinitamente condenados a un silencio abisal, a una reflexión desesperada. Su mirada ciega, el diminuto disco de oro inexpresivo y sin embargo terriblemente lúcido, me penetraba como un mensaje: «Sálvanos, sálvanos»..."

Axólotl, Julio Cortázar.